miércoles, 31 de agosto de 2011

OTRO RITMO

Miércoles, cuarto día en tierras austríacas, cuarto día de relax. Y es que eso es lo que estamos haciendo: descanso y relax total.

Estamos en una casita de madera sobre Wattens con vistas a Innsbruck, y sobre es literalmente sobre, ya que nos encontramos a 1.350 metros de altitud en la ladera de una empinada montaña a la que se llega por una serpeante carreterita y un tramo final por pista de arena con alguna pendiente que a nuestro turismo se le atraganta un poco.

Des de la casa todo son pistas y bosques de enormes arboles, todo hacia arriba con bastante desnivel. Vista al valle sobre Wattens, Hall e Innsbruck.

Aquí todo invita a llevar otro ritmo: cocina de leña, sin microondas, sin lavavajillas, todo requiere su tiempo, y para que nos vamos a engañar, cuando lo tienes es un gustazo poder vivir con esta calma que tanto difiere de nuestro día a día.



Dormir hasta hartarse, hacer el remolón para salir de la cama, desayuno y más descanso. Salir a hacer un trotecillo, estirar bien, comida sana y buena hidratación, la siesta de rigor y más descanso. Todo esto regado con algún rato de lectura y el Campeonato del Mundo de Atletismo y la Vuelta comentado en alemán por Eurosport, tiene su encanto.

Cada día hemos salido a rodar un poco, cacos (caminar+correr) obligados por la orografía del terreno para no excederse en el esfuerzo, buenos estiramientos y algo de gimnasia, algo más de 1 horita diaria, como poco a la mínima te salen 300 metros de desnivel positivo. Las sensaciones son muy buenas, el descanso es milagroso, no sé si llegaremos muy bien o muy mal a la Transalpine, pero descansados seguros que sí.

El lunes estuvimos en Innsbruck haciendo el turista, este ha sido nuestro mayor contacto con la civilización estos días, por aquí arriba no se ve a nadie. Esta tarde llegarán Samuel y Lidia, mañana volveremos a hacer el turista y el viernes camino a Oberstdorf a vivir nuestra segunda Gore-Tex Transalpine-Run. Ya hemos respirado algo de ambiente runner, en Innsbruck una chica nos paró, Judith vestía la camiseta de FINISHER del 2008, una canadiense que participa este año con una amiga alemana y al igual que nosotros aprovecha los días previos, en los alpes nos volveremos a encontrar.

Pues aquí estamos como reyes: en la montaña, rodeados de naturaleza, tranquilidad, relax y sin prisas. Para muchos puede sonar a aburrido, para nosotros es la gloria.

1 comentario:

Rafa Bethencourt dijo...

espero que mejores tu arte y tu postura en el corte de madera con el hacha!!!! jajajja!!!
abrazos y envidia y disfrutad a tope!!!!