sábado, 21 de noviembre de 2009

ECOGRAFÍA

El martes era el día de la resonancia magnética con mapeo de cartílago, el próximo martes antes de la visita al traumatólogo tendré los resultados.

El miércoles era el día de la ecografía de ambas rodillas para comprobar el estado de los tendones, en especial del rotuliano, en busca de pequeños nódulos o vasos que pudieran implicar un problema tendinoso crónico. Resultado: los tendones son normales, no se aprecian anomalías, están perfectos.

Siempre es bueno que una parte del cuerpo, y más de las articulaciones esté bien, por supuesto, pero si eliminamos la tendinitis, y teniendo en cuenta que hasta la fecha el resto de pruebas han salido siempre bien, ¿qué nos queda?.

Nos queda esperar al martes, al resultado de la nueva resonancia y a la opinión del doctor, que es el que sabe de esto.

La verdad es que después de la eco me volví a venir abajo, estamos como en julio, con dolor y sin saber por qué, por tanto sin saber qué hacer, sin poder programar una rehabilitación, sin poder enfocar el trabajo, el esfuerzo y la ilusión en nada concreto. Lo único que está claro es que en mi rodilla algo no está bien.

Hay que seguir, veremos qué pasa el martes, y si no, pues a buscar más y más opiniones hasta que demos con quien nos solucione este problema.

La realidad es que hoy estoy igual que en julio…y agosto, y septiembre y octubre, y…. No puedo correr, no puedo hacer lo que más me gusta, veo como se esfuman y se convierten en imposibles los objetivos que tenía marcados para el 2010, buenos planes con buenos amigos. No sé ni cómo, ni cuándo, ni cuánto podré correr.

Intento llenar ese vacío con la bici, me gusta pero no es lo mismo, echo de menos trotar con Judith, hacer planes, mirar carreras, compartir ilusiones y objetivos. Se me hace muy difícil pasar horas en la carretera o sobre la mountain bike sin ella cerca, podríamos estar haciendo series, rodajes o largas tiradas por nuestras queridas montañas, disfrutando juntos que es lo que más nos motiva y lo que inició nuestra pasión por este deporte. No es entrenar por estar fuerte, por la competición en sí mismo, es que lo hacemos y vivimos juntos en una misma dirección.

No podemos hacer nada más, hay que ser fuertes y seguir, aunque a veces la verdad es que se hace muy cuesta arriba, pero somos corredores de montaña, no? las cuestas arriba son nuestro entorno preferido, y somos corredores de largas distancias, no? acostumbrados a los largos y eternos caminos, al esfuerzo, al sacrificio y a la superación.

En este momento tengo que ser más ultra corredor de montaña que nunca, os aseguro que está siendo la carrera más dura y complicada que he corrido nunca.

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